En los mitos japoneses, encontraras una gran variedad de historias sorprendentes, pero con algo religioso, místico y mucho simbolismo; también hay influencia de elementos mitológicos de china que hablan acerca de amor, terror, princesas, dioses, kamis, deidades, entre otros
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Mitos japoneses
Los japoneses tienen una cultura, que se nutre de sus leyendas ancestrales, que aún se mantienen vivas en la población actual; las creencias en sus dioses se han transformado a lo largo de los años; sus mitos se han reducidos a un simbolismo y leyendas antiguas; pero su colección de kami (dioses) son exhibidas en los panteones, como señal de seguir siendo “la tierra en la que nace el sol”
Sus mitos se entrelazan entre dioses; hermosas princesas que se tienen que rescatar; los samuráis que luchan hasta el final por su honor; los terribles monstruos que intentan hacerle daños a sus pobladores; grandes misterios sin resolver por el hombre; su primer mito comienza con la creación del mundo que describe la formación de sus ocho islas comprenden el territorio de la civilización japonesa.
Algunos mitos japoneses se basan en ceremonia de sus actos que realizan en vida cotidiana; de igual forma le dan mucha importancia a su religión ancestral; como también a la música tradicional; las luchas y hermosos jardines japonés. Siendo los más importante en ella, la narración de los primeros emperadores en su línea sanguínea de la realeza en los años 554 a. C. – 477 a. C. entre los que se pueden contar a: el emperador Itoku, Emperador Annei, Emperador Suizei y Emperador Jinmu, entre otros.
Lo anteriormente mencionado, junto a la fabulosa historia, que gira entorno a Izanagi e Izanami, quienes, con una lanza mística decorada con minerales y piedras preciosas, que les fue dada como regalo por los primeros dioses; dan inicio a la primera leyenda de la mitología japoneses de la creación del mundo. Donde sus dioses del sol, luna, viento, raya, tormenta, agricultura dejan una marcada creencia rodeada de místicos sucesos.
Mitos japoneses de amor
En Japón existe una gran variedad de mitos de amor; con características similares a las China; sus relatos cuentan como una pareja enamorada debe hacer enormes sacrificios para poder estar junta por el resto de sus vidas. La mitología japonesa tiene con figuras de dioses y diosas que ayudan durante todo el camino del amor verdadero. En esta civilización desde los más antiguos tiempos el hombre busca diferentes tipos de amor; el de a su familia y la forma de permanecer juntos para protegerse; el afecto a los amigos de luchas y batallas para encontrar la paz; el querer mantener la armonía en la naturaleza, entre otros.
En lo que se refiere a los mitos de amor hay una famosa practica del “Mi- Ai” donde los padres realizan un modelo de entrevistas al futuro novia de su hija; es el quien selecciona al esposo de sus hijas. Aunque actualmente las parejas en Japón se casan por amor, aun se practica este ritual en lugares públicos, jardines y hoteles como prueba de amor.
Otra ceremonia que se realiza en los mitos de amor es la tradición del té de Samurái. Pero sin duda esta cultura tiene varios mitos de amor, que se mantienes con pequeñas modificaciones en el tiempo, esto son: La mariposa blanca, el bambú, el pescador y la tortuga, el espejo, El hilo rojo del destino; Flor Sakura y los tres monos que se mezclas con el amor silencioso.
La mariposa blanca
En la nobleza japonesa, las mariposas de diferentes colores, son utilizadas para explicar la conexión de sus tres estados: oruga, crisálida y mariposa, con el símbolo de vida, la muerte y la transformación total. También el amor eterno y creen que sus difuntos vuelan en forma de mariposas de colores según su trayectoria por esta vida.
Para hacer un pequeño resumen del mito japonés de mariposa blanca; primero tenemos que decir que se trata de un amor eterno; donde un amable hombre que nunca se casó, ni tuvo relación sexual con ninguna mujer después que su primer amor muriera; se mudó a una casa detrás de un cementerio muy antiguo para cuidar de la tumba de su amada. Todos los días salía muy temprano a llevarles bellas flores y limpiar su tumba.
Un día enfermo el anciano y sus familiares más cercanos fueron a cuidar; estos notaron que una mariposa blanca no se quitaba de su lecho; un sobrino muy joven intento sacar a la mariposa; esta voló hasta una tumba llenas de flores hermosa y se perdió entre ellas; el joven regreso a la habitación a seguir cuidando del anciano. Pero ya era inútil este estaba muerto. Desde ese momento este mito de amor del viejito llamado Takahama, revelan el secreto que el guardo por muchos años pero que nunca le quito una bella sonrisa.
Mito japonés el hilo rojo
En muchos pueblos de Japón, los abuelos les cuentan a las jóvenes la leyenda del hilo rojo del destino; como forma de explicar que hay que esperar a la pareja que el destino les tiene guardada. También creen que las parejas, amigos, compañeros que están destinadas a conocerse están unidad por un hilo rojo; sus hebras son resistentes al tiempo, distancias, tormentas y más, sus nudos son resistente al fuego, agua y aire; estos hilos son los que manejan nuestros destinos.
El pueblo nipón, es el que más habla del hilo rojo del destino; lo asocian a los Chakras o dedo del corazón; algunos lo asocian al equilibro de energías que transmiten los sentimientos, la pasión, y el amor de pareja. Es importante señalar, que existe más de una leyenda que se fundamenta que cuando estos hilos están atados nadie los puede romper este vínculo; en este mito existe un hilo rojo que une dos personas; ambas permanecen unidas por el amor pase lo que pase, estos suceden desde el nacimiento.
Lo más relevante de esta de este mito es que cuando las personas se encuentran por primera vez se conectan con las energías de la llama del corazón, uniendo los dos meñiques, muchos emperadores ha tratado de cortar el hilo rojo del destino; lo que causas gigantescos enredos en este hilo. Pero al final las dos puntas se tienen que unir; desde ese momento los corazones se hacen uno solo y la pasión se desbordo por todo el cuerpo equilibrando las energías para encontrar la paz interna.
De esta historia, han surgido una variedad de rituales japoneses, que busca canalizar las energías vibratorias que producen los hilos rojos en el corazón; también hay brujas que se dedican a conectar estos hilos de manera más rápidas y sin equivocarse.
Mito de Flor Sakura
En las islas de Japón se cuenta, muchas leyendas sobre una mujer llamada Shizuka, quien era una fuerte guerrera que logró escapar del régimen militar japonés de la época; en su huida dejo atrás su gran amor; ella le toco recorrer largos comino sola; cuando empezó a enfermar se hizo un bastón con una rama de árbol seco. La mujer ya estaba desesperada porque no encontraba su amor; su fuerza apenas la lograban mantener en pie; un día decidió clavar su bastón y acostarse sobre una alfombra de hoja y flores secas; donde murió.
Con los años creció una mata de cerezo; que al principio tenía las flores blancas. Pero al mezclarse con la tristeza de Shizuka y la poca sangre que le quedo de su sufrimiento amoroso; los pétalos de las flores de este árbol se tornaros rosa pálido. También se dice que el árbol de cerezo quedo hechizado; si lo abrazas fuerte se puede sentir lo mismo que en un corazón humano.
En los bosques japoneses de cerezos, se encuentran plantados miles de árboles esperando hacer florecer el amor eterno de algún guerrero, que por sus luchas ha dejado a un lado vivir un gran amor sobre todos los samuráis, y princesas que están casadas con emperadores; pero su corazón pertenece a otro hombre
Mitos japoneses de los Tres Monos
Hace mucho tiempo en las tierras occidentales; se lograron encontrar tres monos, con las siguientes características: uno no veía, el otro no escuchaba y el tercero era sordo; su sabiduría fue para la mitología japonesa un cúmulo de creencias; estas tres figuras se hicieron tan popular culturalmente, que el Japón se les construyo el templo de Toshogu.
En cada uno de estos monos prevalece un concepto de sabiduría; en el caso del que no escuchaba, observaba continuamente a los seres humanos para registrar sus mala actuaciones, el que no habla se dedicaba a escuchar con atención lo que dicen los hombres cuando están solos y el ciego se conformaba con oír atentamente lo que hablan los demás para hacerse una idea con todos los detalles a sus compañeros. Estos animales fundan el lema de mejor oír, ver y callar para nunca meternos en problemas.